Autovía con niebla

Cómo conducir con niebla y poca visibilidad

Con la llegada del otoño y próximos al invierno, las condiciones meteorológicas se pueden convertir en un poderoso contratiempo a la hora de coger nuestro vehículo e iniciar un viaje por carretera. La lluvia, la nieve y sobre todo la niebla son fenómenos que tenemos que tener en cuenta en nuestros desplazamientos. Son elementos hermosos y característicos de esta época, pero también son una de las principales causas de multitud de accidentes.

De entre todos ellos, a continuación vamos a fijar nuestra mirada en la niebla. Según la Organización Meteorológica Mundial, la niebla  no es más que “la suspensión de gotas pequeñas de agua en el aire”. Son, en realidad, nubes muy bajas que se producen por la evaporación de la humedad en el suelo que reducen la visibilidad horizontal en menos de un kilómetro.

La conducción por carretera se vuelve, por tanto, muy peligrosa. Es fundamental prestar la máxima atención y seguir algunos consejos para evitar males mayores.

Consejos útiles para conducir con niebla

Siguiendo la máxima del sentido común y no confiando en nuestra destreza en el manejo del vehículo o el conocimiento de la vía por la que circulamos, podemos concretar en alguno de ellos como son:

  • Uso adecuado de las luces
  • Adaptar la velocidad al terreno
  • No cambiarnos de carril y parar en el arcén
  • Permanecer alerta ante el posible cruce de animales por la vía
  • Usar adecuadamente los frenos no realizando maniobras bruscas y haciéndolo intermitentemente
  • Aumentar la distancia de seguridad con el vehículo que tenemos delante.
  • Revisar el estado del parabrisas, teniendo en cuenta el vaho en el interior y no usando el limpiaparabrisas en el exterior

Junto a ellos, la lógica también nos dice que ante un caso de conducción con niebla, la reducción de la velocidad y no tener prisa, conducir sin ruidos en el interior del coche para escuchar la situación que se presenta en el exterior y para en un lugar seguro, son consejos que, sin duda, nos ayudarán ante el fenómeno de la niebla.

Tampoco debemos olvidarnos de los intermitentes y la ropa reflectante para los viajeros. En el caso extremo de parar, es obligatorio su uso por nuestra seguridad. La norma genérica de tener el vehículo en perfectas condiciones antes de iniciar un viaje es fundamental ante la llegada del otoño e invierno. El paso por un taller de confianza es una cita obligada. También es conveniente informarnos previamente mediante los medios de comunicación o de las múltiples aplicaciones del teléfono móvil del estado del tiempo que se prevé por la zona que vamos a circular.

Parar en un lugar seguro, la mejor solución

La mejor medida que podemos tomar ante la conducción por una vía que presenta bancos de niebla es, sin duda, parar en un lugar seguro. Al grado habitual de fatiga y cansancio que provoca la conducción se une un mayor esfuerzo en estas condiciones, por lo que el riesgo de sufrir un accidente aumenta considerablemente.

Abades Áreas dispone de una completa red de estaciones de servicio, en las que puedes no sólo descansar, sino también encontrar todo lo que necesites. Son espacios que se pueden definir como “terminales de aeropuertos en carretera”. En ellas encontrarás amplios aparcamientos. Y también zonas de relax para poder disfrutar de un café o un aperitivo.

Zona de descanso y mesas para comer

Abades Áreas están concebidas y diseñadas para que rápidamente puedas localizar lo que necesitas. De esta manera puedes pasar por un completo self-service  que ofrece diariamente, no sólo bocadillos, sino exquisitos platos preparados en el mismo momento y con productos de la zona. Por el contrario si eres más de comer a la carta, en ellas, también tienes la posibilidad de sentarte en el restaurante y degustar un excelente menú.

Pero aún hay más, en Abades Áreas no nos olvidamos de las mascotas y ellas son bienvenidas en nuestros establecimientos. Sabemos lo importante que son para ti y no podemos dejarlas en el exterior.

La niebla es uno de los mayores enemigos del conductor. Un elemento que puede aparecer por sorpresa. Sin embargo se puede convertir en una grata experiencia si paras en una de nuestras áreas de servicio. No en vano, llevamos como eslogan: “Abades Áreas, próxima sonrisa”.